La ironía puede servir a distintos fines. Si proviene del placer denigratorio, deja un sabor amargo, incluso en aquel que la practica. Resulta entonces dañina, y su efecto obedece a un impulso destructivo, disfrazado de deleite verbal, más que a un afán de poner en evidencia una realidad insensata. Sin embargo, cuando apunta a desmantelar algún asunto, puede ser tan eficaz como necesaria y su éxito reside en la complicidad que establece con el lector.
¿ SABEN EL PORQUÉ DE ESTE BLOG ?
Porque estoy harto de:
mentirosos, estafadores,caraduras,
mitómanos,aprovechadores,inmorales,
amorales, incumplidores,atorrantes,
encubridores.
El rubro inmobiliario tiene varios de estos especímenes